Cuentan que el rey Hieron II ordenó fabricar una corona de oro para celebrar sus triunfos pero, cuando estuvo hecha, surgió la duda de si realmente contenía este metal puro o si, por el contrario, los orfebres lo habían mezclado con plata para quedarse con parte del oro. La cuestión fue planteada a Arquimedes, quien hábilmente pensó en resolverla calculando la densidad de la corona y comparándola con la del oro puro. Sin embargo, había un pequeño problema, y es que la corona no se podía fundir para convertirla en un cuerpo regular y determinar así su densidad a partir de su masa y su volumen.
¿Cómo, entonces, lo resolvió Arquímedes? Pues con certeza no se sabe, pero perfectamente pudiera haber sido aplicando su famoso principio. Imaginemos que Arquímedes puso en un plato de una balanza la corona del rey Hierón y, en el otro, la misma masa de oro puro hasta que ambos platos estuviesen equilibrados, es decir, hasta que hubiese la misma masa en cada uno de ellos. Y seguidamente sumergió los platos de la balanza en el agua.
Puestos a imaginar, supongamos que el orfebre se hubiese quedado con parte del oro y lo hubiese sustituido por plata, la cual tiene una densidad más baja que la del oro. Y puestos a seguir imaginando, supón que eres Arquímedes y tienes que explicarle al rey Hierón que el orfebre le ha engañado ¿Cómo le convencerías? Como siempre, las respuestas a los comentarios.
Pero acabo de caer en la cuenta que no hay que ir a la Antigua Grecia para resolver un problema similar. En la última práctica comprobamos que Arquímedes tenía razón calculando los pesos reales, aparentes y el empuje de varios objetos. Si os pidiese que calculáseis las densidades de los dos cilindros que utilizamos, la cuestión es muy fácil; medimos su masa con una balanza y calculamos su volumen sumergiéndolos en una probeta con una cantidad conocida de agua, tal como hicimos. Así que nada, con dividir la masa entre el volumen, pues resuelto. Pero, ¿y si no tuviésemos la masa de los cilindros?
Imagina por un momento que olvidamos tomar este dato y lo único que conocemos son sus volúmenes y sus pesos reales y aparentes cuando están sumergidos. ¿Cómo podríamos calcular la densidad de los cilindros? Inténtalo y compara los resultados con los obtenidos aplicando la fórmula de la densidad. Los datos que necesitas son que la densidad del agua es de 1000 kilogramos por metro cúbico y que la aceleración de la gravedad g=9,8 m/s2.